lunes, 18 de octubre de 2010
Sin moverme un centímetro
Las horas pasaban a parpados cerrados,
a pesar de que queriamos dormir
permaneciamos despiertos.
Bebiendo agua, comiendo dulces
Cómo se devela la vida?
No supe si torcer el destino
Me invitan a consultar con la almohada
pero la mía no habla
se queda durmiendo conmigo
No sé por qué cierro tan poco los ojos
el gusto de estar acostado
entre sábanas amorosas
esparciendose entre sueños
El deseo de estar siempre despierto
de hacer tantas cosas
de no parar
es como tener hambre por todo
como llenarnos de cosas que no nos sirven
Dicen que ya no se puede
después de saltar entre las palabras
volver a sumergirse en los libros y crecer raices entre páginas
Todo nos cambia y la voracidad nos cambio
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