Palabras tras palabras
caen desde el cielo de nuestra boca tapando el piso de nuestras vidas.
Al comienzo con cierta originalidad
mi primer papá,
mi primera nube
y mi primer caricia,
los veo como pececillos arcaicos y gigantes nadando en el piso
con el pasar de los años se fue todo tapizando de fonemas conjugados
unos con otros, repitiéndose una y una y otra vez
85.000 platos quebrados,
106.502 te amo s
Cuantas veces no he dicho mar, plata y agujero?
Esta todo nuestro vocabulario en una máquina de lavandería,
reciclándose, limpiándose de antiguos sentimientos
Una centrifugadora gigante que olvida caras y nombres
uniones y quiebres.
No hay ninguna palabra reservada para nadie.
caen desde el cielo de nuestra boca tapando el piso de nuestras vidas.
Al comienzo con cierta originalidad
mi primer papá,
mi primera nube
y mi primer caricia,
los veo como pececillos arcaicos y gigantes nadando en el piso
con el pasar de los años se fue todo tapizando de fonemas conjugados
unos con otros, repitiéndose una y una y otra vez
85.000 platos quebrados,
106.502 te amo s
Cuantas veces no he dicho mar, plata y agujero?
Esta todo nuestro vocabulario en una máquina de lavandería,
reciclándose, limpiándose de antiguos sentimientos
Una centrifugadora gigante que olvida caras y nombres
uniones y quiebres.
No hay ninguna palabra reservada para nadie.
No hay comentarios:
Publicar un comentario